El cannabidiol (CBD) ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus potenciales beneficios terapéuticos. Sin embargo, el acceso y uso de productos a base de CBD puede estar regulado y controlado dependiendo de la jurisdicción y del tipo de producto. En este artículo, te explicaremos quién puede recetar CBD, así como las regulaciones asociadas a su prescripción y compra.
En aquellos lugares donde el CBD está regulado como medicamento, sólo los médicos con licencia pueden emitir una receta para productos específicos de CBD. Estos productos suelen estar formulados para tratar condiciones médicas específicas y se dispensan en farmacias autorizadas.
Entonces, ¿qué condiciones deben ser tratadas con CBD?
Los medicamentos a base de CBD se utilizan comúnmente para tratar una variedad de condiciones médicas, entre las más comunes se encuentran:
- Epilepsia: El CBD ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de ciertos tipos de epilepsia, como el síndrome de Dravet y el síndrome de Lennox-Gastaut.
- Dolor Crónico: Algunas investigaciones sugieren que el CBD puede ayudar a reducir el dolor crónico, especialmente el asociado con enfermedades como la esclerosis múltiple y la artritis.
- Ansiedad y depresión: Aunque se necesita más investigación, algunos estudios preliminares indican que este componente puede tener efectos ansiolíticos y antidepresivos.
- Trastornos del Sueño: El CBD también se ha utilizado para mejorar la calidad del sueño en personas con insomnio y otros trastornos del sueño.
Si bien, algunos estudios demuestran que el cannabis medicinal tiene posibles beneficios para varias afecciones, como las que acabamos de nombrar, también es importante conocer los diferentes tipos de productos de cbd que existen en el mercado, ya que existe una clasificación entre aquellos que requieren una fórmula médica y los que no, ¿cuáles son?
Con fórmula médica
- Epidiolex: Utilizado para el tratamiento de ciertas formas de epilepsia, como el síndrome de Dravet y el síndrome de Lennox-Gastaut. Es un medicamento aprobado por la FDA en Estados Unidos y otras agencias regulatorias en varios países.
- Sativex (Nabiximols): Se utiliza para tratar la espasticidad en pacientes con esclerosis múltiple y requiere receta médica debido a su contenido de THC y su uso específico.
- Marinol (Dronabinol) y Cesamet (Nabilone): Utilizados para tratar náuseas y vómitos causados por la quimioterapia y para estimular el apetito en pacientes con SIDA.
- Productos con Alta Concentración de CBD: Algunos aceites, cápsulas y otros productos de CBD con concentraciones muy altas (generalmente más de 1,000 mg de CBD por envase) pueden requerir receta médica. Estos productos se utilizan para tratar condiciones severas como dolor crónico, ansiedad severa y ciertos trastornos neurológicos.
Además de los medicamentos recetados, existen numerosos productos de CBD de venta libre que no requieren receta médica. Estos incluyen:
- Aceites y tinturas: Se toman por vía oral y son populares por su facilidad de uso y dosificación precisa.
- Cápsulas y comestibles: Proporcionan una forma discreta y conveniente de consumir CBD.
- Bebidas infundidas con CBD: Desde agua con CBD hasta tés y cafés, estas bebidas están ganando popularidad.
- Productos de belleza y cuidado personal: Cremas, lociones y sueros con CBD se utilizan para tratar problemas de la piel y proporcionar alivio localizado.
En resumen, los médicos pueden recetar CBD, especialmente cuando se trata de medicamentos aprobados para condiciones específicas. No obstante, muchos productos de CBD, como los suplementos y tópicos, no requieren una receta médica y están ampliamente disponibles. Es crucial estar bien informado y consultar a un profesional de la salud para garantizar un uso seguro y efectivo del CBD.